Mis respuestas sin las preguntas: La entrevista no transmitida.

Me formé como músico más en un concepto autodidacta que en la tradición escolástica. Desde mis 20 años empecé a rodearme de diferentes experiencias, populares, académicas, integrales… En el año 1992 inicié mi primer proyecto de cámara, un Dúo de guitarras homenaje a mi maestro Jorge Benzaquén, Compositor y músico de formación general avanzada quién emigra a tierras de luz en el año 1993; tenía yo 20 años y comencé a involucrarme con el gremio general estudiantil guitarrístico, asistir a conciertos, hacer vida de músico… Aunque inicié mi formación formal en la escuela de música producto de enlaces hechos por mi maestro, no los llegué a completar, fui un alumno con una boleta llena del puntaje más alto, pero muchas cosas no me cuadraron, entre ellas lo aletargado del avance respecto al individuo y soy muy impaciente, como buen autodidacta voy a mi propio ritmo… Recuerdo que tocaba obras de octavo año, grababa discos con Iván Adler, (padre de la mandolina académica en nuestro país y por cierto uno de los fundadores de la orquesta Sinfónica Simón Bolívar)… Y aún así mi año curricular era de un segundo aprobado… Pedía nivelaciones que jamás se me aprobaban por un tema burocrático… Comencé a ver esta situación repetidas veces en mis compañeros… ¿Cuantos talentos abandonaron? Muchos… amigos míos que en aquel entonces se preguntaban qué sería de ellos después de completar tantos años de carrera… Me pasó como ha pasado con algunos empresarios, abandonamos el colegio porque nos damos cuenta que desde adentro es imposible cambiar las cosas, yo no iba a poder cambiar la burocracia educativa en las escuelas de música desde adentro. A mis 20 años de edad tenía material de mis quejas personales escritas en un cuaderno que aún conservo, me di cuenta que con las quejas solo existen un camino, hacerlo todo nuevo, diferente… Me dije entonces que debía ganar ciertas experiencias, organizar ese cuaderno con ideas constructivas, escribir un plan que un día inició con una letra… La “A” y concluyó hace poco en la “Z”… Así comienzo a involucrarme en diferentes círculos, llego por ejemplo a la compañía Yamaha la cual aprecio mucho en mi formación técnica, al grupo instrumental de cámara Multifonía como mi formación artística… La oportunidad del Dúo Intermezzo junto a Adler para mi formación interpretativa… Mi ojo en él huracán en crecer como compositor, en nutrirme de la experiencia corporativa con la Yamaha, luego en la orquesta de cámara Amadís amplié mi experiencia con la práctica del liderazgo como un asociado a su fundador, el maestro Jesús Ardila… En el año 2006 tenía todo un material escrito con todas mis respuestas organizadas a lo que debía emprender y la oportunidad llega justo en un núcleo de orquesta de cuerdas pulsadas de Amadís, ahí nace la primera orquesta de guitarras del SLOG. Luego de muchos cambios de palabras e ideas, eso sí, siempre muy frontal separo camino de Jesús Ardila, quién es sin duda un hermano, e inicia la puesta en marcha de mi plan. Nace CERT producciones C.A; me rodeo de otro círculo, abogados, contadores, mercadotécnicos… formo equipos, integro todo eso escrito, y materializo la primera orquesta formal del SLOG para obtener un primer molde. Lamentablemente no tengo un final feliz que contar para esa primera orquesta… pero me ahorro ese cuento para llevar la fiesta en paz, sin embargo, el modelo quedó, y de ahí ha sido reflejarlo al continente. Actualmente tenemos 43 espacios de desarrollo en Venezuela, varios en otros países, hemos crecido mucho académicamente y formamos a un nivel alto a velocidad de rayo. 

 Somos un sistema franquicia; pero antes de ampliar la respuesta, debo dirigirme a este punto. Mira, si hay alguien a quien admiro y respeto es al maestro Abreu. Lo comprendo muy bien de hecho porque como él yo soy fundador, de los de cero a mil; sin más apoyo que mi fe. Menciono esto porque hace poco alguien me presentó como su competencia jajajaja… Fue ridículo eso en realidad porque no tengo intención de medirme con un monstruo de la visión como lo es el maestro Abreu, además con tantos años de ventaja. Sin embargo; algo que él debería saber, es que la orquesta de guitarras del conservatorio Simón Bolívar nace en el seno del SLOG, mi orquesta fundadora… El SLOG se diferencia en mucho a lo que conocemos ahora como Fundamusical, porque para iniciar nuestra razón corporativa social es empresarial, el SLOG es un sistema de pequeñas empresas a las cuales llamamos orquestas; aunque mantenemos un concepto social, nuestro interés primordial es hacer que las orquestas sean autosustentables y que el músico sea la fuente de trabajo para otro tipo de profesionales, un poco vivir mi propia experiencia personal pero sistematizada a gran escala.

 Debo decir que tengo cierta preocupación por el futuro del músico formado desde el sistema de orquestas de Fundamusical; y lo he expresado en varias oportunidades, tal vez se me tilde de loco, pero soy un loco que demuestra cosas, y no lo hago con ningún tinte de envidia, al contrario; por genuinas ganas de que su labor continúe es que me permito enmarcar diferencias. Aunque el crecimiento institucional del sistema creado por el maestro Abreu a dado muchos regalos al país y formado excelentes músicos, siento que la base que sustenta al sistema en pocos años no se dará abasto financiero para su crecimiento exponencial, lo que traerá competencia desleal entre músicos por el tema desempleo… Muchos se pueden frustrar en el camino al no ver cumplidas ciertas promesas. Lo que busco en el SLOG es formar a un tipo especializado de guitarrista con la capacidad de emprender y sostener su propio esfuerzo y el de otros profesionales, no ir a buscar el empleo, ser la fuente de empleo. Esto lleva otro tipo de ideología respecto a cómo se generan los soportes sociales y financieros. No estoy para nada de acuerdo con una educación tan gratuita que se confunda con derecho divino a la frase “Manténganme que para eso vivo”, busco un tipo de formación que libere al individuo del salario, lo convierta en motivador y formador de equipos con proyectos involucrados a una base, en este caso a la del SLOG. Crear plataformas cero a mil, eso le da una perspectiva de sanidad y perpetuidad a un gremio que ya no compite porque todos crean su realidad organizativa. Cada año en nuestro continente se gradúan miles de guitarristas talentosos que de pronto descubren que no graduados ganaban más dinero, cada año desertan otros miles para ubicarse en otros oficios… Lo que planteo en el SLOG es que los desarrollos de orquestas de guitarras son una plataforma adecuada, pero voy a más, no quiero ser parte del gasto público nacional, de cualquier nación; quiero incrementar el producto interno bruto nacional; ser el nuevo petróleo.

Espero el Nirvana jajajajaj. En serio… Hace años le decía a una amiga que me aportó tiempo al principio de la fundación del SLOG, Clareana Colina… Fue mi alumna y creadora del logo de CERT Producciones C.A. Le decía en tono chistoso que esperaba un día llegar a un Edificio llamado CERT y que me mal atendiera una secretaria pintándose las uñas… Y que me dejara esperando afuera mientras ubicaban al fundador… Yo jajajaja… Por cierto… Despedida esa secretaria…

Ahora me reflejo como montado en una lanchita, con un motorcito que se prende, se apaga y al cual debo darle cuerda y gasolina hasta que arranque y navegue lo que corresponda, luego de eso hago como el capitán de Forrest Gump; me lanzo al agua reconciliado con el mundo jajajaja.

Creo que luego de todo esto mi plan es dejar que Dios haga su plan conmigo; ahora él y yo somos una sola discutidera jajajaja, pero nos entendemos jajajaja.

Cuando compongo para guitarra u otro instrumento yo solo coloco notas, armonía, lo básico… Que se las arregle el intérprete… jajajaja. Lo que quiero decir con esto, es que muchos compositores no sé para que se graduaron de compositores si no se atreven a explorar; muchos esperan sin hacer oficio se les rinda tributo; tengo al momento de esta gentil entrevista 823 piezas compuestas, todas con la guitarra, pensadas en sus diferentes oficios, guitarra solista, acompañada, acompañante…Y jamás me ha llegado alguien a decirme te comisiono para que crees esto o aquello. La música en el compositor debe fluir, para eso objetivisa la creatividad en los estudios de la composición. Si me dicen que del planeta Marte trajeron un instrumento musical extraño, yo compondré notas para que algún intérprete de Marte la toque… ¿Mala o buena? Para eso se hace el oficio, para ganar en la práctica… Eso sí; ese instrumento marciano estará acompañado de la guitarra. 

Cuando alguien interpreta una obra de mi autoría pienso en que mi hija se gradúa en otras universidades, otras manos la recrean a su medida, le muestran nuevas conductas… Mi hija, mi obra… La sensación de que la debes dejar ser y crecer bajo la medida interpretativa de alguien más, de que ella debe defenderse y defender a su papá también. A mí en este caso. Agradezco a los intérpretes lo que ellos puedan agradecerme por componer; he tenido en mi carrera descubridores; gente que me ha enseñado a conocer a mi propia creación; el caso de Iván Adler; ingresó en mi psique y le dio enfoque a mi estilo, el caso de Jesús Ardila en Amadís, quién ha tratado con tal amor mi música que diría es suya. Y hace poco desde otros países me hacen llegar otros criterios, lenguajes y acentos que desconocía hablaban mis obras… Pienso en gratitud, la misma que mi madre expresa cuando sabe de alguien que me ha dado posada.

             Al emprender proyectos musicales complejos, lo primero es tener claro un propósito; Si hacemos un curso de inglés, es porque tenemos en mente un viaje o negocios con el extranjero, si hacemos un curso de computación, es porque usaremos la herramienta en un fin específico. Si quieren hacer carrera en la música, deben ser más amplios que ser solo músicos; Steve Jobs hablaba de los conectores, que no son más que diferentes eventos de tu vida que unes a una idea matriz… Si me leíste, te das cuenta que mi secreto es justo eso; aplico mis conectores a mi creencia de misión personal y esto amplía mi visión, pero sin separarme del foco… Que es la música en la guitarra. Proyectos complejos… creo que todos lo son, lo que diferencia al proyecto por su complejidad no es este en sí mismo, es el tamaño de la visión, la misión y sobre todo la voluntad para materializar al sueño. Es la persona la que define al proyecto, en su mente puede tener un kiosquito o una cadena de kiosquitos… Y esto nos lleva a diferentes tipos de entrenamiento. Yo no pensé en una orquesta de guitarras, pienso en miles por todo el continente; eso me lleva a otra clase de compromiso.

Todo si duda comienza en el propósito… ¿Cual es el tuyo?